La vida en suspenso, jornada 26

Martes 8 de abril

21.15
Mientras paseo el paseo despejado de otra vida que no sean perros con personas al extremo de una cuerda -inclinamos brevemente la cabeza por temor a romper el silencio- observo cientos de ventanas iluminadas: salones, comedores, cocinas donde las personas toman su cena confinadas; algo ligero, dos, o tres capítulos de alguna serie televisiva y acostarse en la esperanza de que un día más sea un día menos. Sobre el puente cruza solitario, veloz, silencioso un coche con una sirena azul en lo alto.

21.22
Arces, castaños de indias, plátanos, sauces despliegan exuberantes hojas recién verdecidas, ajenos a otra presencia que no sean los pájaros cruzando el aire, piando despreocupados sobre sus ramas. Todo remite a un mundo por venir; sin nosotros, meros accidentes.

21.28
De vuelta a casa atravieso la Alameda despoblada. El parque infantil vacío de infantes -los accesos clausurados con cinta policial- semeja el escenario de un crimen por cometer. En el barco, el entramado de cabos y escalas conduce a la cofa despejada de futuros piratas. Permanece iluminada desde el día que se instaló. Recuerda la cúspide del Empire State Building parpadeando estos días en rojo, sobre la noche oscura de Nueva York.

21.32
En los estantes envases de cristal conteniendo fósiles, mundos pretéritos: vieiras, mejillones, lapas, almejas, fusiformes, amonites hablan de mares que cubrían la Península en lugares insospechados. No es extraño dejarse llevar por una melancolía futura de animales saltando entre las terrazas de los edificios, acudiendo a los roquedos en busca de alimento: Angkor, Copán, Palenque, Tikal, Machu Picchu…

21.45
Salta en la pantalla del móvil un recordatorio: Zaragoza-Calatayud-Munébrega (18.5km). Debería haber dormido en Zaragoza y tomar después el tren a Calatayud, caminar desde allí 18.5 kilómetros para alcanzar Munébrega y preparar la siguiente etapa hacia Acered. Seguirán saltando, como tránsitos que conducen a vías muertas en mi existencia, caminos evolutivos hacia los seres que nunca fuimos.

21.52
El Efecto Doppler* explica el sonido más o menos agudo de un ser vivo u objeto cuando se acerca o aleja hacia nosotros -una ambulancia, un abejorro, ...- también parece explicar por qué las galaxias se alejan unas de otras y por qué el Universo se expande. Más prosaicamente el radar de la Guardia Civil cuando nos sorprende a más velocidad de la debida. He vuelto a perdérmelo: Efecto Doppler, Radio 3, Laura Barrachina de 21 a 22 horas.

22.30
No ocurrirá lo mismo con Mindhunter y su extraordinaria colección de personajes: Holden Ford, Bill Tench, Wendy Carr, Ed Kemper…En el seno de la misma especie que hace miles de años desconocía el fuego, la mente simbólica o el lenguaje habitan hoy seres que cometen crímenes horrendos contra jovenes muchachas y obtienen placer sexual volviendo al lugar donde los llevaron a cabo.

01.30
Soy demasiado influenciable, tal vez debería cambiar de lecturas.


*Christoph Hendrik Diederik Buys Ballot, investigó las hipótesis de Doppler en 1845 para el caso de ondas sonoras y confirmó que el tono de un sonido emitido por una fuente que se aproxima al observador es más agudo que si la fuente se aleja. Demostró de manera ingeniosa el efecto Doppler mediante trompetistas montados en trenes en marcha.